Poco
a poco, avanzaba…
Observaba,
transpiraba, jadeaba…
Chocaba…
su abdomen pegaba…
Incitaba,
su pupila desafiaba…
Ternura,
entre vellos dispensaba…
Omnipotencia
y amor mezclaba…
Ojos
verdes, Plaza Congreso…
Chomba
fucsia, lentes, febrero…
De
ese instinto me vi preso…
Barba
corta, pinta obrero…
Caminaba,
tarde, ocaso…
Su
entrepierna era un sueño…
Hora
pico, gente al paso…
Mi
atención tenía dueño…
Entre
bocinas, transpirado…
Algo
calvo, lindo bulto…
Calor,
gente, yo excitado…
Algo
ingenuo, algo culto…
-
¿Qué hora es? – quiebra el clima…
Me
sonríe, me sonrojo…
Mi
presión está en la cima…
De
vergüenzas me despojo…
Entre
gente que va y viene…
El
reloj sigue adelante…
Entre
labia que uno tiene…
Dos
ositos de levante…
-
¡Sos muy lindo! ¿Con lugar?
-
¿no sabés lo que te haría!
Eros
levanta el pulgar…
-
¿A tu casa o a la mía?...
Rara
la combinación…
Verano,
pelos y panza…
Siempre
cierra la ecuación…
Con
un oso todo alcanza….
No hay comentarios.:
Publicar un comentario